La versión de Batman Returns para Megadrive fue programa y diseñada por Sega en 1992, al igual que las versiones de Game Gear y Master System II, y es absolutamente diferente a la versión de Konami para Super Nintendo que salió en 1993.
A diferencia del beat'em up de la consola de Nintendo, en Megadrive nos encontramos con una juego de plataformas y acción en la que controlaremos a Batman y en la que los escenarios respetan los ambientes oscuros y góticos de la película de Tim Burton. Es una mejora evidente de Batman, también de Sega, y se trata de uno de los mejores títulos al que he jugado sobre el murciélago.
El aspecto técnico está muy cuidado. Los gráficos de los personajes de los oscuros decorados han sido han sido tratados con mimo, y todos tienen una excelente calidad. La animación de los sprites y el scroll también son para quitarse el sombrero. El aspecto sonoro podría haber estado un poco más cuidado. Las músicas son discretas, pero no enturbian la acción y se dejan oír. Quizás lo peor del juego sean los efectos de sonido, que si bien no se les puede catalogar de malos, la verdad es que sí que son bastante flojos. También es una pena que no hayan incluido el tema principal de la película.
Donde más destaca el juego es en su jugabilidad. Las acciones de Batman son sencillas de realizar y responde muy bien al pad. A pesar de ello, estamos ante un título con una dificultad constante y muy alta, pero eso no hace más que alargar la vida del juego.
El juego sigue más o menos el argumento de la película. El peligroso criminal conocido como El Pingüino, al que el magnete sin escrúpulos Max Shreck pone en favor de la opinión pública de Gotham City, tiende una trampa a Batman para que todo el mundo crea que fue él quien asesinó a la Princesa de Hielo. Al mismo tiempo aparece un nuevo personaje, Catwoman, la secretaria de Max, que fue asesinada por su jefe y resucitada por los mordiscos de unos gatos. Batman tendrá que derrotar al Pingüino, a la sensual Catwoman y limpiar su nombre.
Cosa que habrá que hacer a lo largo de 5 fases muy variadas y de estilos muy diferentes, aunque todas ellas compartirán el ambiente oscuro de Gotham City. El juego tiene un estilo multifase al más puro estilo Ocean, una empresa que hacía juegos para Spectrum, y los niveles tan pronto son ascendentes, como lineal, como hacia abajo y en pendiente.
En conclusión, estamos ante un juego muy bueno, muy difícil y que hará disfrutar a los aficionados al murciélago. Muy recomendable.
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