Terranigma es un juego programado por Quintet y publicado y distribuido por Enix para Super Nintendo en 1995, aunque para su llegada a Europa tuvimos que esperar hasta abril de 1997. Se trata de la secuela de Illusion of Time, y como tal estamos ante un muy buen juego de aventuras y acción, aunque en mi opinión esta entrega supera a todos los niveles al Illusion of Time.
Para empezar, en esta entrega tenemos mucha mayor libertad de movimientos. Se mantiene la vista aérea y utiliza un sistema de combate en tiempo real, como en la precuela o en otros títulos al estilo Zelda. Podemos realizar un gran número de ataques diferentes que iremos ganando a medida que se desarrolle la aventura. Las habilidades iniciales del protagonista son la de correr y saltar, pero pronto adquiriremos otras como la de atacar. Para esto primero tendremos que equiparnos con un arma. El sistema de consulta de estado, items y demás es bastante original. Se trata de una especia de caja viva que encontraremos al principio del juego a la que entraremos directamente. Esta tiene varias puertas que se corresponden con cada uno de los elementos típicos de este juego. Es en esta caja donde encontraremos la primera arma. Las diferentes mazmorras es para mí el mayor parecido que tiene esta entrega con el Illusion of Time, y en ellas tendremos que abrirnos paso entre enemigos cada vez más poderosos, abriendo o descubriendo caminos secretos hasta llegar al jefe final de la mazmorra. Lo que cambia completamente es el sistema de mapeado. También utiliza el modo 7 para los desplazamientos largos, pero en esta ocasión no son rutas prefijadas, sino que tenemos libertad para movernos por donde queramos, con lo que el juego es bastante menos lineal que el anterior título.
El apartado técnico es muy bueno. El protagonista no llega al tamaño del Illusion of Time, pero cuenta con un buen sprite y muy bien animado. Lo mismo podemos decir de los enemigos, llegando algunos, sobre todo los jefes finales, a tener un tamaño enorme. Los escenarios en cambio sí llegan completamente a los del juego anterior, siendo estos variados, coloridos y llenos de detalles. Cuenta además con una muy buena banda sonora, con melodías variadas y de gran calidad compositiva y de audio, aunque los efectos de sonido son bastante más flojos.
En cuanto a la jugabilidad, destaca el sencillo manejo del protagonista. No importa que el personaje tenga tantos ataques diferentes, ni que trepe, nade, salte o escale. El control siempre es exquisito y muy sencillo, unido todo a esto a respuesta perfecta a las órdenes transmitidas por medio del pad. Es además un juego bastante largo y con una dificultad ajustada. Pero esto no es nada con respecto a la tremenda adicción que su enganchante historia que encierra el cartucho.
En Terranigma, la tierra es retratada como una esfera hueca que tiene una cara interna y otra externa. Desde el comienzo de la tierra, el externo Lightside , la superficie mundial, se situó para el crecimiento mientras que la interna Darkside, representa la caída. En el transcurso de miles de millones de años, estas dos fuerzas pasaron a llamarse Dios y Diablo. Independientemente del antagonismo interior, un rápido progreso hizo raíz y formas de vida primitivas evolucionaron a plantas, animales y seres humanos. La industria y tecnología revolucionaron la evolución, pero la lucha entre Dios y el Diablo todavía estaba teniendo lugar, más feroz que nunca. El conflicto culminó en una batalla final en el punto más austral del mundo superficial. Sin embargo, ninguna de las dos fuerzas salió victoriosa. Los continentes del mundo de la superficie se sumergieron en el mar y el bajo mundo fue sellado.
Ark es un niño travieso que vive en Crysta, el único pueblo en el mundo inferior. Después de abrir una puerta prohibida y tocar una misteriosa caja, todos los ciudadanos de la aldea son congelados. La única persona no afectada por la maldición, el Anciano, lo guía para resucitar a los continentes del mundo superficial a fin de liberar al pueblo. Aparece una forma de salir de su ciudad natal, y por primera vez, un ser humano deja Crysta para explorar el bajo mundo, que es retratado como un páramo congelado de imponentes montañas de cristal, atravesada por ríos de magma. Según las palabras del Anciano, Ark debe conquistar las cinco Torres, que representan cada una un continente.
Deberá conseguirlo en todo un mundo de lo más amplio. Para ayudarnos contamos con los items propios de este tipo de juegos, que se traducen en armas, armaduras, cascos y demás objetos de ataque y defensa, a parte de los objetos de restauración de vida de siempre, pasando por los de curación de estados alterados. El dinero que suelten los enemigos será también fundamental, además de que tenemos que pelear las veces que sea necesario para subir de nivel y poder así plantar cara a los enemigos más duros. Otros elementos típicos presentes en este título son las posadas, tiendas y demás parafernalia típica de todo juego de rol que se precie.
En resumen, un excelente juego de aventuras y acción para Super Nintendo que supera ampliamente a su precuela, sobre todo en cuanto a los temas de linealidad y dificultad. Obra maestra.
Pues dale duro, que lo merece. Además, este es uno mis rpgs favoritos de Super Nintendo y aplasta al Illusion of Time, que para mí es demasiado sencillo.
ResponderEliminarAquí me tocas la fibra sensible.
ResponderEliminarTerranigma es uno de mis RPGs favoritos de todos los tiempos, junto al Illusion of Time/Gaia y Chrono Trigger.
Por siempre tendrá un lugar de honor en mi corazón.
Pues sí, es un magnífico RPG con una historia de los más envolvente. En cuanto al Illussion of Time, lo que no me gusta de él es su simpleza, y es muy difícil atascarse porque prácticamente te dan la pista de lo que hay que hacer. Esto lo hace idóneo para los que empiezan con este tipo de juegos.
Eliminarcada vez que recuerdo haber visto este juego en la estanteria del Centro Mail durante meses, pudriéndose de asco, por 5000 cochinas pesetas...como me arrepiento de no haberlo comprado!!
ResponderEliminarAdemás, es para mí la mejor entrega de la trilogía.
Eliminar