Jeep Jamboree: Off Road Adventure es un juego programado por Gremlin Interactive y publicado distribuido por Virgin Games, saliendo únicamente a la venta en Estados Unidos en julio de 1992. Nos encontramos ante un muy buen juego de carreras de todoterrenos en el que compite el famoso Jeep Wrangler. El juego posteriormente se incluiría en una compilación llamada Race Days, en el que comparte presencia con otro juego de carreras, Dirty Racing.
En el juego conduciremos uno de estos míticos jeeps, viendo todo en primera persona desde el interior del todoterreno, y nuestra misión será competir contra otros todoterrenos que participan también en las carreras. El tipo de vista va a recordar a juego estilo Hard Driving, pero sin ser ni poligonal y un juego más arcade. Los circuitos serán zonas lodosas y tendremos que competir contra otros vehículos con la intención de llegar en primer lugar a la línea de meta. Al ser un título tipo arcade, tendremos que evitar detenernos mucho porque hay que llegar a la meta o al checkpoint antes de que se agote el tiempo. Como modalidades de juego tenemos las típicas, es decir, un torneo, una carrera contra el ordenador o una carrera contra otro jugador a través del cable link.
El apartado técnico está bastante bien. Gráficamente es un juego que luce muy bien para ser Game Boy, Lo que vemos del interior de nuestro vehículo está la mar de bien, con volante que se mueve cuando giramos de forma realista, así como los demás elementos del cuadro de mandos como el cuentaquilómetros, que están muy bien dibujados. Por otro lado, los vehículos rivales están muy bien realizados, con movimiento fluido, y un buen efecto a la hora de acercarse y alejarse. Por otro lado, los circuitos son muy variados y detallados, con una buena imitación del scalling y una muy buena sensación de velocidad. Contamos con melodías de buena calidad y con unos efectos de sonido muy resultones.
En cuanto a la jugabilidad, la mecánica del juego es la de un juego de carreras convencional, aunque siempre visto desde el interior del vehículo como en Hard Driving o Test Drive, y en general resulta ser un juego muy divertido y adictivo, el cual tiene un control muy sencillo, con lo que manejar el Jeep es bastante fácil, y de una buena respuesta a los controles de la Game Boy. Por lo demás, contamos con una muy buena cifra de circuitos, siendo esta la cifra de 20, y de un nivel de dificultad bien ajustado, aunque es un juego que necesita que seamos precisos.
En resumen, un muy buen juego de carreras de todoterrenos con el mítico Jeep Wrangler de protagonista. Muy recomendable.
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