Battle Cars es un juego programado por Malibu Interactive y publicado y distribuido por Namco para Super Nintendo, saliendo únicamente en Estados Unidos en octubre de 1993. Se trata de un muy divertido juego de carreras y combate el cual emplea el Modo 7.
El juego es similar a otro título del mismo tipo como es el clásico F-Zero, siendo un juego de carreras futuristas de aeronaves. El juego emplea la misma tercera persona que tiene el citado F-Zero, y para el movimiento de la carretera usa también el Modo 7. Lo que distingue a este juego del clásico de carreras de Nintendo es que los coches están equipados con todo tipo de armas, las cuales podemos emplear para eliminar adversarios. El juego se compone de 9 fases con dos circuitos cada una. El primer circuito va a ser una carrera campo a través y el segundo una carrera en un circuito digamos más profesional. Al finalizar una carrera se nos da cierta cantidad de dinero dependiendo de nuestra posición y del número de adversario abatidos. Con este dinero podemos comprar equipamiento para nuestro vehículo y mejoras en las diferentes armas. Contamos con 3 vehículos de inicio, aunque en el modo multijugador se puede jugar con los vehículos de los tres primeros jefes.
El apartado técnico está muy bien. A nivel gráfico va a recordar mucho a otros juegos de conducción que usan el Modo 7, especialmente a F-Zero. El diseño de nuestro vehículo está muy bien, se mueve fluidamente por la pantalla, y además nos vamos a encontrar con otros vehículos enemigos también de movimientos rápidos y muy bien realizados. Los circuitos serán bastante detallados y variados, y el uso del modo siete está muy bien implementado, dando un efecto bastante espectacular, y los efectos de las explosiones y los disparos están muy bien realizados. Por otro lado, las melodías son bastante animadas y muy bien compuestas, mientras que los efectos de sonido son de muy buena calidad.
En cuanto a la jugabilidad, la mecánica del juego es muy similar a la ya vista en F-Zero, pero añadiendo la capacidad que tenemos para disparar a los adversarios, siendo un juego de carreras muy divertido, trepidante y adictivo. Y control que tenemos sobre los vehículos es muy sencillo, se manejan de forma muy cómoda y responden muy bien a las órdenes del mando. Por lo demás, el número de fases está bastante bien, y el nivel de dificultad está muy bien ajustado, aunque se puede hacer complicados en niveles avanzados.
En resumen, un muy buen juego de carreras en Modo 7 para Super Nintendo. Muy recomendable.
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