Maze Hunter 3-D

Maze Hunter 3-D es un juego programado, publicado y distribuido por Sega para Master System, saliendo primero en Estados Unidos en 1987, y luego en Japón. Corea y Brasil en 1988, y por último en Europa en 1989. Nos encontramos ante un divertido juego de laberintos con vista cenital, que es uno de los siete juegos de Master System preparados para las gafas 3D SegaScope, un periférico paea Master System que permitía ver en 3D ciertos juegos preparados para el aparato.

El objetivo del juego es ni más ni menos que encontrar la salida de cada laberinto, pero antes debemos encontrar la llave que permite abrir la puerta que nos lleva al siguiente laberinto. Estos están infestados de monstruos y otros enemigos, y debido a que en un principio carecemos de arma, en un primer momento debemos evitarlos, aunque pronto nos haremos con el arma principal del juego, una tubería roja, además de otros power-ups como zapatos que nos permiten saltar o trajes con habilidades especiales. Los enemigos estarán situados en el laberinto de forma aleatoria, lo que le da un cierto tono al juego de rogue-like, pero no lo es, porque el diseño de los laberintos es siempre el mismo.

El apartado técnico está muy bien. A nivel gráfico luce muy bien, con un protagonista bien diseñado y de movimientos fluidos y una variedad de enemigos, pero lo mejor son los diferentes escenarios, sobre todo en cuanto al color usado, aunque quizás mejor aún sea el logrado efecto 3D de los detalles de los escenarios y que supongo que con las gafas se vería genial. Por medio de trucos con artilugios externos tipo Action Replay se puede pasar el juego a 2D. La música suena bien y es adecuada y los efectos de sonido simples pero resultones.

En cuanto a la jugabilidad, tiene una mecánica bastante interesante, pues en parte parece un simple juego de puzzles, pero tiene también toques de action rpg, y en general contamos con un control bastante bueno, sencillo y directo, además de una buena respuesta al pad. La extensión del juego está bastante bien, y la dificultad del juego tira a elevada, y no por la complejidad de los laberintos, que son en realidad bastante sencillos, con apenas bifurcaciones, sino por el comportamiento errático y aleatorio de los enemigos, a los que nunca se sabe por dónde van a tirar.

En resumen, un buen juego de laberintos y acción para Master System que tenía el atractivo de poderse ver en 3D con unas gafas especiales. Muy recomendable.