Shadowgate es un juego programado ICOM Simulations y publicado y distribuido por Mindscape para Macintosh y Amiga en 1987, siendo portado posteriormente NES, PC, Atari ST, Nintendo Switch, Xbox One y PlayStation 4. La versión de NES, publicada por Kemco, apareció en 1989 en Japón, saliendo a la venta en Europa el 30 de mayo de 1991. Nos encontramos ante la primera entrega de la saga Shadowgate, por lo que se trata de una excelente aventura gráfica en primera persona.
El objetivo del juego es ni más ni menos que explorar cada estancia del castillo donde se ubica la aventura, que además recibe el mismo nombre que el juego. En estas habitaciones debemos resolver puzzles, recoger objetos y demás elementos típicos de una aventura gráfica, al igual que hablar con diferentes personajes. Durante nuestra aventura es obligatorio llevar una antorcha para ver lo que vamos recorriendo, habiendo un número limitado de antorchas, y además actúan como si fuera una especie de cronómetro, lo que significa que debemos acabar la aventura en un tiempo limitado. Si se nos acaban todas las antorchas nuestro protagonista primero se mareará y acabará con el cuello roto, dando por acabada la aventura. Esta no es la única forma que tenemos para morir, porque este juego es precisamente famoso por las múltiples muertes que puede tener el protagonista. Entre estas muertes está la de ser quemado por un dragón, devorado por una mujer lobo, ser disuelto por ácido o el suicidio, y además hay que indicar que toda solución incorrecta a un puzzle acabará en muerte. Entre los objetos que podemos encontrar hay armas con las que podemos dar muerte a ciertos enemigos, aunque no las podemos emplear contra cualquier enemigo ya que esto no es un juego de acción. A diferencia de la versión original del juego, en la que una vez muerto hay que cargar una parte guardada, en esta versión intentaremos los puzzles en el mismo lugar donde hemos muerto.
El apartado técnico está muy bien. A nivel gráfico nos vamos a encontrar unos escenarios en primera persona bastante decentes, siendo bastante detallados y variados, además de bien ambientados gracias al uso de color, que es una gran diferencia con respecto a la versión original, la cual es en blanco y negro. También los diferentes personajes y enemigos que nos vamos a encontrar están bastante bien dibujados. La música suena bastante bien y se ajusta al tono de la aventura, aunque hay muy pocos efectos de sonido, pero es un tipo de juego que no necesita de más.
En cuanto a la jugabilidad, nos vamos encontrar una aventura gráfica en primera persona bastante original para su época, además de que la historia está bastante bien y el desarrollo del juego es entretenido y muy adictivo, gozando de menús de acción y consulta bastante intuitivos y muy fáciles de usar. La extensión del juego está bastante bien y mientras no sabemos lo que tenemos que hacer se hace bastante complicado, especialmente porque muchos de los puzzles son del carácter de ensayo y error.
En resumen, una muy buena aventura gráfica en primera persona para NES. Obra maestra.
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